miércoles, 16 de enero de 2008

Carmen Amaya, una fiera con Duende


Carmen Amaya es una figura de leyenda única e irrepetible. Esta mujer menuda ponía toda su alma en el baile. Puro nervio y fuerza, un torbellino que hipnotizaba a quién la contemplaba.

Su arte se exendía a las palmas, al chasquear de sus dedos, al repiqueteo de las castañuelas y al cante.

Su baile de golpes fuertes, duros y secos en el taconeo, moldeado a fuego. Su rostro tan especial y enérgico, sus feroces dislocaciones de cadera y la fiereza de sus vueltas quebradas reflejan el duende que llevaba dentro.
Decía que una buena bailaora se coloca como Dios manda, zapatea, sube los brazos y da las vueltas como tiene que ser.
Fue la primera mujer que se atrevió a bailar flamenco con pantalones y lo hizo por una razón bien sencilla, para que se le pudieran ver los pies. Hasta que ella llegó el flamenco en las mujeres se centraba de cintura para arriba, en la postura de los hombros y la espalda, en el juego de manos y dedos y en el cimbreo de la cintura. El zapateo, el taconeo apenas lo practicaban las bailaoras y ella lo hizó como ninguna.

2 comentarios:

Juan Luis Álvarez dijo...

Enhorabuena por el artículo, me ha gustado mucho. espero que sigáis con esta difusión del flamenco, que para los que no lo conocemos mucho viene muy bien. Por cierto, qué foto más bonita

Esther Gálvez dijo...

Hola guapa!! Acabo de mirar un poco de su biografía, es impresionante su figura. Además, es una de las batallitas más recurrente de mi padre cuando la vio bailar en uno de sus espectáculos, y habla de su fuerza en el escenario. Gracias por acordarte de ella.

Esther Gálvez Serrano